Los primeros controles de precios llegaron ya por parte de la Superintendencia de Costos y Precios (SUNDECOP), desconociéndose tanto la fórmula como el modelo estadístico empleado para determinarlo, por lo que pensamos que los mismos fueron estipulados al libre albedrío toda vez que la Superintendencia lo hizo a través de una desconocida “fórmula no lineal” para todas aquellas presentaciones. Entre los productos que según el gobierno se especulaba mucho con el precio, el mayo rublo que se destacó fue el de las toallas sanitarias y protectores diarios, el cual sufrirá una disminución del 25,48%, a partir del primero de abril de los corrientes, de no tener vida el pataleo a la cual acudirá sus productores, algo muy delicado por cierto porque de producirse la escasez de dichos artículos, nuestras mujeres tendrán que recurrir a la “hoja de Eva”, los detergentes y el champú son otros de los productos que mayor especulaban según el gobierno. Del otro lado, son las compotas conjuntamente con los suavizantes para la ropa, los artículos que menos roban a la gente, cuya reducción no llega en ambos rublos ni al 5%, de hecho el descuento estipulado en las primeras por la Sundecop es de apenas 20 céntimos y en el caso de los suavizantes es de Bs. 1,20. En este contexto, muy a pesar de estas reducciones arbitrarias por parte de la Superintendencia de costos y precios y como bien los muestra el cuadro, a la larga si compráramos un solo artículo de los 19 sometidos a la reducción, el ahorro del consumidor solo será de Bs. 93,64, es decir, ¡ni siquiera llega a Bs. 100!.
El otro detallito que tiene esta imposición arbitraria de precios, tiene que ver con el hecho de que si bien es cierto, la Sundecop reconoce costos y gastos de importación de insumos o productos terminados, no indica por ninguna parte si tomó como referencia el tipo de cambio de Cadivi, o el siempre variable tipo de cambio del Sitme, o el negro? Del mismo modo, la Superintendencia también hizo caso omiso a los costos que recurren las empresas por los retardos en Cadivi, donde las mismas deben optar por mecanismos financieros para poder satisfacer a sus proveedores internacionales, como la adquisición de préstamos extranjeros que se colocan como depósitos de garantías mientras que la Comisión de divisas le dan la gana de autorizar los verdes. En todo caso, el asunto ya tiene fecha y las cartas comenzaran a barajarse a partir del primero de abril de los corrientes, donde los productos de no satisfacer sus costos con los precios estipulados por la Sundecop, comenzaran a desaparecer de los anaqueles para provocar escasez y por tanto inflación para demostrar el fracaso de esta ley arbitraria e interventora que ha sido tan anunciado.
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