lunes, 31 de enero de 2011

PDVSA hizo la reapertura del Petrobono 2017 dentro de un gran “antro de corrupción”

Como sabemos el lunes 17 de enero de este año la estatal petrolera realizó en los mismos términos y condiciones la reapertura de la oferta del Petrobono emitido en octubre de 2010 con vencimiento en noviembre de 2017 y con cupón de 8,5% por US$ 3.150 millones!, mediante una colocación privada y directa dirigida al Banco Central de Venezuela, y a otros fondos, de los cuales US$ 2.000 millones de lo recolectado, sería para cancelar una deuda con el Banco Central!, en pocas palabras Ramírez, emite deuda, que le compra Merentes, para que éste al mismo tiempo se pague una deuda que le debe Ramírez, quedando de nuevo Ramírez endeudado con Merentes!, en un proceso donde el kinomatemático cobró y también se dio el vuelto!. Lo primero que debemos decir de este antro de corrupción, es que si bien es cierto, que durante el primer semestre del pasado año fue público y notorio que el BCV le prestase o le comprase bonos a Pudrevsa, se habló incluso de US$ 4.000 millones!, estos no fueron registrados en el Informe Financiero que presentó la estatal petrolera en el primer semestre del año que sirvió de soporte para la emisión de los Petrobonos 2017, nada de eso se dijo allí, ¿ni cuanto fue?, ¿a que tasa?, ¿plazo?, todo como siempre avalado por los alcahuetes de KPMG. Hoy solo se sabe que la suma sobrepasó los US$ 2.000 millones, ya que de los US$ 3.150 millones recién “reabiertos”, se utilizaran dos mil melones verdes para pagar parte de esa deuda, si acaso!.


Ahora el informe al que hacemos alusión si dice como “evento subsecuente” que el 5 de agosto de 2010, Pudrevesa completó un proceso de colocación privada de bonos por US$ 1.587 millones (Bs.6.824 millones), con vencimiento en el año 2014; pagaderos en dólares a su vencimiento, agregando que “esta emisión fue realizada en coordinación con el BCV y el Ministerio del Poder Popular de Planificación y Finanzas, siendo adjudicada en su totalidad al BCV”, esto también había sido una reapertura del Pudrebono 2014 que había sido emitido en octubre de 2009 por lo que su tasa de rendimiento anual es de 4,90% con única amortización a la fecha de su vencimiento, y es el mismo informe que sostiene que “parte” no se sabe cuanto, de los fondos recibidos fueron utilizados para cumplir con el pago de la obligación que PDVSA mantenía desde diciembre de 2009 con la Oficina Nacional del Tesoro (ONT), que tampoco refleja el informe, por lo que aquí el antro de la corrupción se convierte en todo un “Triangulo de las Bermudas” entre Ramírez (PDVSA), Merentes (BCV) y Giordani (MPF). Hay que recordar que este negocio de la deuda con la ONT es de vieja data.

Así las cosas, hasta donde tenemos entendido en diciembre de 2006 por vez primera, la estatal petrolera emitía 5 pagarés a esta Oficina por US$ 4.700 millones entre 5,35 y 5,37 por ciento de interés con vencimiento entre los meses de enero y abril de 2007, que cumplió a cabalidad la empresa en ese año, para de nuevo emitir un nuevo pagaré en diciembre 2007 a la misma ONT esta vez por US$ 6.000 millones con una tasa entre 4,7 y 4,8 por ciento, que fue cancelado entre febrero y junio del año siguiente. Pero como Pudrevsa le agarró “gustico a la cosa”, seis meses mas tarde de haber pagado el último pagaré, emitió otro en Diciembre 2008 a la misma Oficina, esta vez por US$ 4.400 millones, pero pidiéndole cacao a la misma ya que los intereses de este compromiso fueron establecidos entre 1,80 y 1,96 por ciento para pagarlo entre julio y noviembre de 2009, fecha en la cual Pudrevsa efectivamente los canceló, pera una vez mas, en diciembre de ese año, la empresa again, emitió otro pagaré por US$ 4.466 millones donde se extendió mucho el vencimiento porque la vaina esta apretada, así la estatal petrolera lo tiene que cancelar entre julio 2010 y junio 2011, a una tasa de interés entre 2,46% y 2,93%. Como se ve en total la Oficina Nacional del Tesoro en este “reciclaje de pagarés” ha financiado a PDVSA en casi US$ 20.000 millones!, y quien va creer que no quedó nada pal buche.

sábado, 29 de enero de 2011

Dos años consecutivos con un déficit en Balanza de Pagos en más de US$ 10.000 millones

En el 2010, en cuanto al déficit de Balanza de Pagos, quedamos igualito que en el 2009, lo que significa que por segundo año consecutivo cerramos el año con un faltante de más de US$ 10.000 millones en las cuentas de la nación, lo que indica al mimo tiempo que la devaluación del 100% llevada a cabo por el Gobierno a principios del pasado año, ni frenó las importaciones, ni muchos menos estimuló a las exportaciones no petroleras, las primeras solo se contrajeron en un 1%, cuando estas pasaron de US$ 38.442 millones en el 2009 a US$ 38.062 millones en el 2010, según el Gran Mensaje de Fin de Año de la BCV, mientras que las segundas pasaron de US$ 3.394 millones a US$ 3.432 millones para el mismo periodo, todo lo cual representó apenas un aumento del 1%, con lo que se puede decir sin temor a equivocarnos, que en Venezuela una devaluación del 100% lo que hace es frenar las importaciones en 1% y estimular las exportaciones no petroleras en ese mismo porcentaje, en estas cuentas sólo las exportaciones petroleras mostraron un aumento del 11%, pero fue producto por el al aumento de los precios del petróleo como ya lo sabemos.

La balanza de pagos 2010, también nos deja un hondo pesar, un saldo de cuenta capital y financiera que cerró con un balance negativo de más de US$ 20.000 millones!, lo que significa en términos castellanos que salieron del país mucho mas capital, que los que ingresaron, la cifra supera en más de US$ 6.000 millones el también saldo negativo de esta cuenta en el 2009 y menor en US$ 4.600 millones del saldo negativo de 2008, cuando por la crisis financiera internacional se produjo la hecatombe de los precios del petróleo de ese año. Con este cráter financiero la salvación de la Balanza de Pagos la apostaron en la cuenta de “errores y omisiones”, que debe abarcar lo que se conoce como el capital no determinado y flujos de divisas que tienen lugar y que difícilmente se pueden registrar, como por ejemplo transacciones ilegales: como contrabando, tráfico de drogas, evasiones del control de cambios, así como también cuando existe una gran inestabilidad cambiaria que genera fugas de capitales. Se dice que esta cuenta debe ser un “ajuste” por la discrepancia estadística de todas las demás cuentas de la balanza de pagos, pero lo cierto del caso, es que su contabilidad se debe reducir a su más minima expresión, porque sino el Estado muestra su propia negligencia e incapacidad en el combate del transito de los capitales ilegales que es lo que ha ocurrido en los años recientes, esta cuenta cerró el 2010 en casi los US$ 4.000 millones por lo que Merentes se equivocó o dejó de contar en la Balanza de Pagos del pasado año, nada más y nada menos que esa mínima cifra, gracias Merentes.

jueves, 27 de enero de 2011

Es probable que el BCV se estén otorgando dólares a empresas inexistentes

Ya estamos de vuelta después de ese merecido descanso!, y lo primero que debemos decir en este 2011 es que el fantasma de RECADI, aquel supra-corrupto control de cambio impuesto a principios de la década de los 80 del pasado siglo, desde hace rato que viene apareciendo en las bóvedas de la Bodega Central de Venezuela. Así las cosas, desde la creación del Sitme, hasta diciembre del pasado año, más de US$ 5.000 millones se han entregado a través de este sistema, sin que hasta los momentos se sepa a quienes o a que empresas, y en cuantas cantidades fueron adjudicados los afortunados, ya que esto brilla por su total ausencia en el Mensaje de Fin de Año de la Institución presentado por Merentes, suerte de Memoria y Cuenta de la BCV. De la misma forma, también se desconoce que se hicieron aquellos más de US$ 520 millones que fueron otorgados con la loquetera que habían denominado “Bonos Cambiarios Venezolanos” durante el primer cuatrimestre del año pasado, todo lo cual suman US$ 5.520 millones que nadie sabe a donde han ido parar.

Cuando este ocultamiento de información ocurre, se sospecha con justa razón, que se están aprobando dólares a empresas inexistentes como fue el caso de Recadi, y a las que se les otorga, se le cobran altas comisiones como el caso del 1 x 1, es decir, por un dólar liberado, un bolívar de comisión, práctica que hasta hace poco según nos comentan era aplicada en la propia Cadivi, todo enmarcado en un nido de corrupción que al parecer esta extendido ahora al BCV, no obstante a ello, por lo menos en el caso de otorgamiento de dólares a empresarios, Cadivi se ha cuidado un poco de ello. En este sentido, la Comisión publica frecuentemente todas las empresas con sus respectivos montos a las cuales ha autorizados divisas, el ultimo informe sostiene que desde su creación, Cadivi hasta septiembre del pasado año, ha entregado casi US$ 134.000 millones a empresarios, importadores y comerciantes, de las cuales US$ 113.500 millones han sido para importaciones ordinarias y más de US$ 20.000 millones en “otros conceptos”, en esos cuadros se puede observar el RIF de la empresa, así como los montos asignados, pero la Bodega Central de Venezuela esta muy lejos de llevar ese control.

Aquí vale la pena recordar, que quien ocupa la actual silla presidencial del BCV, es nada más y nada menos que el Kinomatemático de Merentes, hombre dotado de gran un talento para “truncar” cuentas, como así lo hizo con la compra y posterior venta de los bonos argentinos al sistema bancario fuera del tipo de cambio oficial, la fraudulenta recompra de los bonos Brady de 2006 que era una deuda prepagada de la República, en donde la nación perdió mas allá de US$ 800 millones y en la estafa en el pago de la deuda con el Banco Mundial, donde también estuvieron envueltos, Rodrigo Cabeza, diputado actual del Parlatino, así como Rafael Isea, actual Gobernador del Estado Aragua, es que todos los caimanes siempre han sido del mismo pozo.