En los últimos 5 años el Banco Central se ha “equivocado” o ha “obviado” casi US$ 15.000 millones reflejados en la cuenta de “errores y omisiones” de la balanza de pagos

         La Cuenta de “Errores y Omisiones” de toda Balanza de Pagos debe abarcar lo que se conoce como el capital no determinado y flujos  de divisas que tienen lugar y que difícilmente se pueden registrar como por ejemplo,  transacciones ilegales: como contrabando,  tráfico de drogas, evasiones  del control de cambios, así como también cuando existe una gran inestabilidad cambiaria que genera fugas de capitales. Se dice que es un ajuste por la discrepancia estadística de todas las demás cuentas de la balanza de pagos, pero lo cierto del caso,  es que su contabilidad  se debe reducir a su más mínima expresión, porque sino el Estado muestra su propia negligencia  e incapacidad en el combate del tránsito de  los capitales ilegales. En el caso de Venezuela, tal renglón  se ha convertido para la Bodega Central en un simple escape a la ligera para cuadrar la cuenta corriente de la balanza de pagos con su cuenta capital y financiera. En este contexto,  el año 2007 la BCV  terminó con unos errores y omisiones en la Balanza de Pagos de US$ 2.439 millones, en el 2008 con ¡US$ 3.909 millones! que ha sido hasta el momento el máximo histórico en la revolución bonita, para registrar US$ 3.520 millones y US$ 2.158 millones para los años 2009 y 2010 respectivamente. El pasado año según las cuentas preliminares de balanzas de pagos presentada  por Merentes los “horrores  y omisiones” fueron de casi ¡US$ 3.000 millones!, todo lo cual significa que la BCV en estos últimos 5 años se ha “equivocado” o ha “obviado”  casi ¡US$ 15.000 millones! de capitales, cuyo origen es completamente desconocido para las autoridades financieras venezolanas, todo lo cual  demuestra la negligencia pura y silvestre del gobierno en este sentido. 

Esta cuenta se  dramatiza aún más, cuando le agregamos los errores y omisiones luego del paro petrolero. En esta historia debemos señalar, que estos alcanzaron unos aceptables  US$ 795 millones en el 2003, para luego subir astronómicamente a los ¡US$ 2.503 millones para el 2004!, lo que significó un aumento de más del 200%, llegando para el 2005 y 2006 a US$ 3.593 millones y US$ 2.864 millones respectivamente, esto sumados al periodo anterior, alcanza un total de US$ 24.705 millones, pero al agregarle los errores y omisiones de US$ 2.926 millones del  año 2000, los US$ 3.603 millones de 2001 y US$ 2.783 millones de 2003, se llega a una escandalosa cifra de más de  US$ 34.000 millones que la revolución bolivariana ha dejado de contar en su balanza de pagos. Esto es una de las tantas cosas que ocurre cuando un gobierno dura tanto en el poder, que no lo puede echar la culpa a nadie sobre esto, sino que así mismo, para darse golpes de pecho en una iglesia y decir como cuan redentor ¡por mi culpa, por mi culpa,  por mi gran culpa!.