Érase una vez un Banco Central cuya tragedia comenzó el día que sin previo aviso le cambiaron las reservas internacionales que custodiaba desde el imperio de la Reserva Federal de New York al colosal Banco de Inglaterra, en la misma fecha en que se le quitaba también la exclusividad en el manejo de las divisas del país. Luego de eso, se le intentó quitar su autonomía a través de una reforma constitucional que para su momento había fracasado, para enfrentarse a una nueva reforma en noviembre del pasado año, en la cual ahora se establecía entre otras cosas, que el BCV eliminaba la prohibición del financiamiento directo a organismos públicos y empresas del Estado a través de la compra de títulos valores, algo que aprovechó PDVSA a comienzo de este año para que el Ente Emisor le comprará certificados de emisión por US$ 4.000 millones a una tasa de cambio de Bs. 2,60 por dólar. Por si fuera poco, la nueva Ley Orgánica del Sistema Financiero Nacional de reciente aprobación subordina al BCV ante el Ministerio de Finanzas que es el organismo quien presidirá el Órgano Superior de dicha Ley. Pero aún había más, antes de que el BCV de nuevo se sometiera como en los actuales momentos a otra enésima reforma de su ley, ese algo más, lo vino a traer el imprescindible Giordani.
Así las cosas, en la última reforma de la Ley del BCV, publicado en la Gaceta Oficial del 6 de noviembre de 2009, se mantuvo el hecho histórico del Articulo 15, el cual señala con entera claridad que “el Ministro o la Ministra del Poder Popular que tenga bajo su competencia las finanzas publicas”, es decir el actual Ministerio de Planificación y Finanzas “no podrá ser miembro del Directorio del BCV”, es decir no podría tal funcionario en la política económica y financiera del país, pagarse y darse el vuelto el mismo, pero el imprescindible Giordani, que venía asistiendo a ese Directorio como Ministro de Planificación y Desarrollo, alegó que su presencia allí era no menos que indispensable para la vida económica y financiera del país, por lo que aprovechando la nueva reforma de la Ley del Banco, ordenó a la Asamblea Nacional se eliminaría tal prohibición, algo que ya esta aprobado en su primera discusión donde se voló la parte que impedía al encargado de las finanzas publicas del país ser miembro del directorio del BCV, algo inédito en la historia de los Bancos Centrales del mundo!.
Agregado a esto, la Reforma por aprobar entre otras cosas, modifica el Articulo 49 de la actual Ley, al permitir en el segundo párrafo ordinal 6 “la modalidad de crédito directo al Ejecutivo Nacional” sin mucho tapujo, como pedir un fíao en una bodega pues, por lo que las siglas del BCV ahora fácilmente pueden significar “Bodega Central de Venezuela”, algo que colisiona con Ordinal 2 del Articulo 37 del mismo proyecto Ley por sancionar en segunda discusión , el cual “prohíbe” otorgas tales créditos al gobierno nacional, pero de seguro que aquí no le pararan bola ni a Tarzán, ni muchos menos a Chita!.
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