Cuando se hizo el presupuesto 2010, recordemos que este se aprobó a mediados de diciembre 2009 sobre la base de US$ 40 el barril y sobre un tipo de cambio de Bs. 2,15/US$ (la devaluación fue el 9 de enero de 2010), allí se estableció que la regalía petrolera a entregar por Pudrevsa y sus socios al gobierno, es decir el 30% sobre volumen extraído que puede ser en cash o en especie, era de Bs. 24.276 millones, es decir, el equivalente a US$ 11.291 millones, derivados de aproximadamente una producción petrolera de 2.577.853 barriles diarios, puesto que al multiplicar éstos por US$ 40 por los 365 del año y sacándole el 30%, nos da la regalía antes mencionada. Para el presupuesto de este año se estableció una regalía petrolera de Bs. 28.101 millones de nuevo a un precio de US$ 40, y si bien es cierto comentamos recientemente, esta era mayor que la del año pasado, fue sólo en bolívares, porque en dólares representó todo un retroceso. Así las cosas a 4,30 como ya estaba establecido en el presupuesto, esa regalía representó apenas US$ 6.535 millones, que provenía de una producción de ¡1.492.000 barriles diarios de petróleo! (1.492.000 x 365 x 40 x 0,30), aquí las matemáticas aún no han fallado, y demuestra que el presupuesto 2011 que actualmente está por terminarse representó todo un fraude para la nación.
Ahora llegamos al presupuesto 2012, donde el esperpento llorón de Giordani sostiene que lo hizo a US$ 50 con una producción de barriles diarios de 3 millones, si esto fuera cierto, entonces la regalía presupuestada tendría que ser de US$ 16.425 millones, derivados de 3.000.000 de b/d x 365 días x US$ 50 x 0,30, no obstante a ello, se indica en el presupuesto que la misma es de Bs. 47.573 millones, el equivalente a decir US$ 11.063 millones al tipo de cambio de 4,30, por lo que de nuevo Pudrevsa y sus socios chinos, rusos, españoles, italianos, vietnamitas, hindúes, malayos, bielorrusos, entre otros, estafaran a la nación en más de US$ 5.000 millones gracias a los patrióticos servicios ofrecidos por Giordani. Otra cuenta indicaría que una regalía de US$ 11.063 millones establecida en el presupuesto del año que viene, a un precio de US$ 50, significa una producción de apenas 2.020.712 de barriles diarios, puesto que éstos, al multiplicarlos por los 365 días del año y los US$ 50 del valor del crudo, sacándole el 30% a los mismos nos da esa cantidad.
En este contexto si bien es cierto, que el artículo 44 de la Ley de hidrocarburos vigente que establece lo del 30% de regalía por volumen extraído sostiene en su segundo párrafo, que el Ejecutivo Nacional, en caso de que se demostrara a su satisfacción que un yacimiento maduro o de petróleo extrapesado de la Faja del Orinoco no es económicamente explotable con la regalía del treinta del 30%, éste la podría rebajarla hasta un límite de 20% a fin de lograr la economicidad de la explotación, pero ¿de qué pozos estamos hablando para que nos serruchen esa regalía?, ¿cuáles serían esos, en tal caso que se aplicara esta parte de esta ley?. Pero también no es menos cierto indicar, que en la segunda parte de ese mismo párrafo del artículo antes mencionado, queda también el Ejecutivo facultado igualmente para restituir la regalía total o parcialmente, hasta alcanzar de nuevo el treinta 30%, cuando se demuestre que la economicidad del yacimiento pueda mantenerse con dicha restitución. ¿Y quién vigila que eso se cumpla?, ¿Ramírez?, ¿el zamuro cuidando carne?. El asunto es que ya aquí estamos como en los tiempos de Juan Vicente Gómez, en que la sumisión y el entreguismo a los consorcios extranjeros petroleros esta a la orden del día, algo que viene ocurriendo desde el año 1921 fecha en la cual las compañías petroleras extranjeras hicieron su propia ley que los rigió por muchos años en contra de los intereses del país.
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