Cuando el Bandes estrenó su ley en junio de 2008 se estipuló sabiamente en su Articulo 13, que el límite máximo de endeudamiento que podrá asumir la entidad financiera, incluida la emisión de bonos, obtención de préstamos de terceros en moneda nacional o extranjera y cualquier otra obligación de similar naturaleza, no podría excederse en mas de 3 veces de su patrimonio. En septiembre de ese mismo año saldría en gaceta oficial el primer Fondo de Financiamiento Conjunto con China, donde los asiáticos nos prestarían a través del Bandes US$ 4.000 millones. De esta manera, los pasivos totales del Banco que para diciembre 2008 se encontraban en Bs. 9.127 millones pasaron para junio de 2009 a Bs. 22.454 millones, producto principalmente por los Bs. 8.600 millones (US$ 4.000 millones) de ese préstamo chino, toda vez que las obligaciones con instituciones financieras del exterior a más de un año pasaron de Bs. 6.862 millones a Bs. 19.058 millones para el mismo lapso de tiempo.
Para diciembre 2010 las obligaciones con instituciones financieras del exterior a más de un año, que es donde deben de estar registrados lo de los préstamos con los asiáticos cerró en Bs. 33.458 millones, ahora si en lo que va de año del último préstamo con los chinos han entrado US$ 12.100 millones, estos se transforman en Bs. 52.030 millones, que sumados a los Bs. 33.458 millones que se traen del pasado año, elevaría estos pasivos a Bs. 85.488 millones, que al dividirlos entre su patrimonio de Bs. 10.650 millones, origina solamente por este lado un endeudamiento de más de 8 veces de su patrimonio (85.488/10.650), que es la razón fundamental para que la institución no haya publicado sus balances financieros en lo que va del año 2011, convirtiendo al mismo tiempo en ilegal de toda ilegalidad parte del préstamos de los US$ 20.000 melones verdes.
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