PDVSA solo cuenta con una provisión de menos de US$ 1.500 millones para enfrentar los pagos que se le avecinan por las demandas de Exxon Mobil y Conoco Phillips

Para el cierre del 2008 los alcahuetes de KPMG reseñaron en el informe operacional y financiero que Pudrevsa estaba guardando unos US$ 2.000 millones para responder por los litigios y reclamos en la cual tanto nacional como internacional ha estado envuelta la desastrosa empresa, siendo como sabemos las más famosa de ellas la de Exxon Mobil quien promovió arbitrajes y medidas cautelares en contra de la  empresa que era de todos los venezolanos,   por no aceptar en el año 2007 el proceso de Migración a Empresas Mixtas desde los Convenios de Asociación de la Faja Petrolífera del Orinoco firmados en la década de los año noventa del pasado siglo, algo que el gobierno a la final tomó a la Juan Charrasqueado, a esta demanda introducida por la Exxon seguiría  la que también hizo  la Conoco Phillips por la misma causa.   

A principios de ese mismo año  la Mobil  Cerro Negro Ltd. (filial de Exxon Mobil), también presentó una solicitud para que se dictara una orden  de embargo ante el Juzgado del  Distrito Sur de Nueva York.  El embargo solicitado  afectó US$ 300 millones depositados en las cuentas de PDVSA Cerro Negro, mantenidas  en The Bank of New York Mellon, y corresponden a fondos liberados en favor de esta empresa, como consecuencia de la recompra de la deuda contraída para el financiamiento del Proyecto Cerro Negro,  orden que fue confirmada el 13 de febrero de 2008, suma que por cierto en la actualidad continua represada en el banco con sede en New York hasta la terminación del arbitraje.

Al cierre de 2009 la provisión de la estatal petrolera para el asunto de los litigios y reclamaciones se mantuvieron en los US$ 2.000 millones, pero ya para el pasado año la empresa según los de KPMG solo dispone de menos de US$ 1.500 millones  en tal caso que pierda los caso con Exxon y con Conoco Phillips, recursos insuficientes para un pago que oscila entre US$ 7.000 millones en el caso de la Exxon Mobil y de cerca de US$ 10.000 millones en el caso de Conoco, pero al parecer el propio Ramírez menos mal que  tiene una cuentita por allí  en Ocean de Miami para resolver la situación.