El presupuesto
de la nación para este año que agoniza había establecido un endeudamiento legal
de Bs. 41.076 millones para proyectos; Bs. 20.000 millones para un inefable e
insaciable gasto público; Bs. 25.820 millones para un servicio de deuda que
como siempre esta muy mal calculado y Bs. 17.191 millones para una
reestructuración de deuda que nunca se
hace, para un total de Bs. 104.087 millones, y en julio de este año se aprobó un endeudamiento complementario de Bs.
30.000 millones, lo cual elevó la
maldición de endeudamiento en nuestro país para este año en ¡Bs. 134.087
millones!, este complementario serviría como sabemos para supuestamente honrar
las pensiones hasta el 31 de diciembre y las bonificaciones de fin de año, que
irresponsablemente el gobierno no metió para el presupuesto de este año,
mientras que Bs. 5.000 millones de éstos irían supuestamente también
al Fondo Nacional de Prestaciones Sociales de los Trabajadores del Sector
Público.
Pues bien,
Giordani echó marcha a su imaginación y ofreció este año papeles DPN en TIF y
Vebonos con vencimiento para el 2019, 2020 y 2021 para cumplir con ese endeudamiento; Bs. 13.200 millones para el
primer trimestre; 15.600 millones para el segundo; Bs. 18.200 millones para el
tercero y Bs. 15.400 millones que acaba de ofrecer para el último lapso del
año, para un total de Bs. 62.400 millones en papeles de deuda publica. Agregado
a esto, para septiembre de este año el esperpento llorón de las finanzas
públicas del país, hizo también una oferta especial de bonos DPN para los Fondos de Pensiones y Jubilaciones y
otras Instituciones Públicas como el Venezuela, Bicentenario, BIV, Banco del
Tesoro y del Pueblo, así como Fondos de Pudrevsa entre otros, por Bs. 10.000 millones para
contribuir también supuestamente a la
ejecución del Plan de Inversiones de los
Fondos de Pensiones y Jubilaciones, así como otras Instituciones del Sector
Público, es decir, ¡para que todo quedase en casa, pues!, todo lo cual elevo la
emisión de bonos para un endeudamiento
de Bs. 72.400 millones cuando la autorización es de ¡134.087 millones!.
Esto no indica
otra cosa, una vez más, que un manejo
inescrupuloso de la cosa publica, toda vez que al Giordani le están sobrando en
los dos meses que restan de año una autorización legal de endeudamiento de más
de ¡Bs. 61.000 millones! (134.087-72.400). Una de las razones de este sobrante
tiene que ver con que el Ministerio de
Planificación y Finanzas para el Endeudamiento, no ha emitido todavía
bonos internacionales, pero aun así, de
hacerlo en lo que resta de 2012 por unos US$ 5.000 millones supongamos, que
significaría unos Bs. 21.500 millones, estaría llegando a un endeudamiento de
Bs. 94.000 millones, lo que indica que todavía les estaría faltando al
esperpento llorón de las finanzas públicas del país como ¡Bs. 40.000 millones!,
o sea que la deuda publica aparte de
maldita, ahora sobra.
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