Estaba Cadivi tirándose tres,
cuando en junio de 2010 inventaron en la Bodega Central de Venezuela lo del
“sitme dan los dólares”. En ese primer semestre de funcionamiento que terminó
en diciembre de ese año, US$ 5.080 millones fueron arrojados a la calle por ese nuevo sistema para satisfacer
la demanda de dólares en el país, lo que representaba el 26% del total de
divisas liquidadas en forma legal en la economía, puesto que la BCV por orden
de la Comisión de Administración de Divisas
para el mismo periodo había otorgado US$ 14.841 millones. Durante el
2011 mientras que por autorización
de Cadivi la Bodega Central liquidaba
US$ 30.379 millones, el Sitme contribuyó con US$ 8.778 millones, lo que
representó el 23% del total de divisas otorgadas en ese año. Ahora en este primer trimestre 2012
Cadivi ha autorizado US$ 6.842 millones, de los cuales la BCV ha liquidado US$ 6.642
millones mientras que el Sitme ha contribuido con US$ 2.382 millones,
representando esto último el 27% del total de las divisas en juego en el país,
todo lo cual nos lleva a la conclusión que el Sitme ha aprobado según las
cuentas anteriores US$ 16.241 millones, que se extienden a US$ 18.493 millones
cuando colocamos allí los US$ 848 millones de abril, los US$ 965 millones de
mayo y los US$ 440 millones de los primeros quince días del mes en curso, lo
que al mismo tiempo nos induce a sostener que de no haber sido por el invento
llamado SITME, Cadivi estuviera colapsado con un déficit de casi ¡US$ 20.000
millones!
Ahora esta negligencia en el
control de cambios que lleva Cadivi, que según Capriles acabará con ella, le ha costado al Gobierno una
deuda de semejante magnitud (los US$ 18.493 millones para ser más exactos con
sus respectivos intereses), porque de eso es que como sabemos precisamente se
alimenta el SITME y la acción es mucha más dramática porque tales transacciones
no entran en el cuenta de egresos de divisas de la Bodega Central. Así las
cosas, durante el pasado año el ingresos de divisas del país fue de US$ 46.512
millones, de los cuales los empresarios a través de Cadivi se llevaron los más
de US$ 30.000 millones ya comentados que si se anotan como egresos en las
cuentas de la BCV, entretanto que los
US$ 8.778 millones otorgados por el Sitme no se cargan a estos egresos
del país, lo que a la larga produce un total descontrol entre lo que ingresa de
divisas y las liquidadas para la economía, a la larga también Cadivi termina
diciendo como aquella buena y vieja cuña de la televisión: “que haría yo sin ti, papel de aluminio
Sitme”.
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