La semana pasada comentamos el “ilegal” y
“antisoberano” préstamo del Fondo Chino por US$ 4.000 millones a las reservas
internacionales, en donde insistimos que mientras tal no se cancele esas
reservas no son de Venezuela, sino de la República Popular China, pero cuál es
la incidencia real de este ultraje contra la nación. Comentamos recientemente
que para el 14 de noviembre la Bodega Central acumulaba en todo el año un
déficit de US$ 2.200 millones, de tal manera que con esta trampa traidora a la
patria, la reservas que ahora parte de ellas son chinas, se colocan con un
superávit de apenas US$ 2.000 millones, muy insuficiente para pagar
importaciones cuyo promedio mensual es de casi US$ 3.000 millones, así que
dentro de un mes esa marramuncia está chao cheo, y nosotros endeudados con los
asiáticos hasta los teque teque, y pensar que tenemos que pagar en el 2015 como
mínimo US$ 5.000 millones de deuda externa, así que eso se fue como polvo en el
viento caballero.
Por otra parte, con esta cizaña
en donde por cierto el kinomatemático de Merentes no ha dicho ni pio como el
pajarito del presidente, las reservas llegaron al 21 de noviembre a US$ 22.832
millones que multiplicados por el tipo de cambio de 6,30 como corresponde, sólo
llegan a Bs. 143.842 millones, lo que significa que si el total de la liquidez
monetaria para la misma fecha es de Bs. 1,804 billones (Bs. 149.836 millones en
billetes y monedas; Bs. 1,290 billones en depósitos a la vista; Bs. 323.308
millones en depósitos de ahorro transferibles con un y Cuasidinero de Bs.
40.113 millones), significa sin trampa alguna que las reservas están cubriendo
a pesar de la “ayudaita” china el 8% del total de la liquidez monetaria del
país en poder del público, ya que antes de esa ayudaita de María Bolívar
cubrían sólo el 7% devenido de una reservas de US$ 19.501 millones (Bs. 122.856
millones) ante una liquidez total
circulante de Bs. 1,773 billones, es decir, lo que hay en la economía es puro
billete de monopolio, como se observa poco o nada hizo ese ilegal, antisoberano
y tramposo préstamo.
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