No lo pueden
hacer ahorita por las elecciones de diciembre, pero es inevitable, está
crónicamente anunciada, y el mismo Sicad desde hace rato está anunciado de
cuánto será. Si este mecanismo en la actualidad está generando un dólar promedio
de 11,20 bolívares, la devaluación entonces será de 100% sin duda alguna, así
que el nuevo tipo de cambio en la economía será de Bs.12,60 por dólar, mientras
que el dólar-Sicad se irá a Bs. 22, y
nadie chillará, ni los empresarios, ni los comerciantes, ni los
importadores, ni nadie, la razón, la
misma de todos los días Pinky, ¡todo lo
venga será mucho más barato que el
mercado negro!, así que hay que lanzarse como cuando llega la harina pan con la
maldición del ¡bochinche! ¡bochinche! que nos legó Francisco de Miranda.
Pero la
devaluación del 100% será insuficiente para combatir al imbatible negro, el
margen con respeto a este a Bs. 12,60 será siendo alto en 300% y estará más
allá al doble del nuevo dólar-Sicad, pero el negro no se detendrá, cada vez más
se seguirá desprendiendo como Secretariat en el Belmont Stakes de 1973, y
llegará a niveles sin precedentes en la historia económica de la nación. Ese
100% también será también muy insuficiente para respaldar la liquidez monetaria
de la economía, a niveles del 18 de octubre dicho respaldo pasaría de 14% a
27%, es decir, menos de un tercio por lo que seguirá existiendo mucho dinero
inorgánico que seguirá generando inflación.
Quienes
hundieron el barco, Merentes, Giordani, Ramírez son los mismos que ahora lo
quieren sacar a flote, pero no tienen capacidad para hacerlo, lo único que
saben es de devaluación y endeudamiento, y de cómo destruir a un país con un
barril de petróleo que en los últimos tres años ha promediado los US$ 100, que
sirva de esto de una gran lección para las generaciones futuras del país para
que nunca repitan lo que estos tres chiflados hicieron, aunque en esencia esto
es consecuencia de los 13 años de gestión del Comandante Supremo Eterno, del
Gigante.
Ahora todos
los días nos dicen pero hay dinero en la calle, la gente no para de comprar,
los bancos full, restaurantes y discotecas
full, no hay pasajes en avión, circulan muchos carros nuevos, a los que
respondemos: esto es exactamente lo que es una burbuja económica, la gran bonanza
ficticia que caerá como un castillo de naipes, las crisis siempre emanan de las
bonanzas ficticias, es decir, se revienta la burbuja y allí señores buenas
noches, se acaba lo que tanto se daba.
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