Entre abril 2011 y junio 2012 según el propio ministro Rafael Ramírez:¡PDVSA ha dejado de percibir US$ 20.000 millones por los préstamos chinos!

        En abril del pasado año se hizo publico y notorio aquel punto de cuenta presentado por el bellota de Rafael Ramírez  al presidente Chávez, en donde advertía a éste, que como consecuencia del último  préstamo chino por US$ 20.000 millones, su Pudrevsa tendría que mandar  otros 200.000 barriles diarios (b/d) al gigante asiático, que agregados a los dos pactos anteriores (100.000 b/d del primer préstamo y 30.000 del segundo)  totalizaban 430.000 b/d que se iban a un bosque de la China donde la chinita se perdió, lo que representaba para el bellota  el 16% de la producción nacional que representa para la empresa estatal  una carga muy pesada. Aquí el propio Ramírez le sacaba una cuenta al presidente, sosteniéndole que para el primer trimestre 2011 a precio real de US$ 91, los 419.000 b/d enviados hasta ese  periodo  representaban US$ 3.432 millones que ha dejado de entrar en la caja de Pudrevsa, pero que estos se convertirán al final del año en ¡US$ 12.556 millones!, al proyectar el envío de los US$ 430.000 b/d a un precio estimado de US$ 80 (430.000 x 365 x 80), pero Ramírez se “peló”, vean cuanto fue ese costo real.

Según los precios del petróleo entre abril 2011 y junio de este año, 430.000 barriles diarios han significado que a Pudrevsa le haya dejado de entrar más de léase bien la cifra, más de ¡US$ 20.000 millones! contantes y sonantes como así lo muestra claramente nuestro cuadro de hoy,  por estar cumpliendo los acuerdos de los prestamos chinos, Ahora bien, ¿qué se ha hecho con esta realera china? Escuálidamente, algo de eso nos dice el esperpento llorón  de Giordani al sostener en la Memoria y Cuento 2011 del ministerio que dirige que US$ 18.000 millones fueron destinados para “inversión”, habiéndose asignado US$ 14.000 millones al financiamiento de 132 proyectos en las áreas de infraestructura, industria, agricultura, minería, energía, tecnología y asistencia técnica, así no más, sin monto específicos, sin saber cual es el proyecto, sin decir si éstos comenzaron o terminaron, como se ve en la revolución cualquier “recoge lata” podría ser fácilmente ministro de finanzas.