Durante el
primer trimestre comenzó como siempre el Festín de Baltazar, cuando el gobierno
ofreció subastas de Bonos de la Deuda Publica Nacional (DPN) por Bs. 1.600
millones semanales entre el 5 de febrero y el 26 de marzo del año en curso lo que
representó un total ofrecimiento de Bs. 12.800 millones con vencimiento de
Vebonos en el 2024 y 2025, así como los TIF con caducidad para el año 2026.
Sobre estos hechos llama poderosamente la atención de que el gobierno como una
forma de hacer la compra más atractiva de los DPN haya estirado la fecha de sus
vencimientos, entre el 2010 y 2012 la duración máxima de estos DPN era de 8
años, esto fue alargado el pasado año cuando se emitieron TIF a 10 años que
ahora para el 2014 pasan a una fecha de vencimiento de 12 años.
Así las
cosas, para el segundo trimestre de
2013, se han ofrecido Bs. 1.500 millones
semanales entre el 2 de abril y 25 de junio para un total de Bs. 19.500
millones a vencerse los Vebonos en el año 2027, y los TIF entre el 2028 y 2029,
es decir, los primeros tienen una vida de 13 años mientras que la de los
segundos están entre 14 y 15 años lo que
sigue significando deuda interna para rato. Con la suma de estos cronogramas de
subastas el gobierno llega a una emisión de deuda de Bs. 32.300 millones para
el primer semestre 2014, lo que representa sólo el 23% del total de los Bs.
143.460 millones que puede contratar este año.
En cuanto a la
emisión de Letras del Tesoro, estás ha ido también aumentando con respecto al
año anterior de Bs. 3.050 millones mensuales durante el 2013 a Bs. 4.000
millones mensuales para este año. Aquí la ley permite una circulación de letras
cuando termine el año de Bs. 13.100 millones, lo que también representó un
aumento de casi Bs. 4.000 millones toda vez que tenía que haber en circulación
al cierre del ejercicio fiscal del pasado año Bs. 9.280 millones.
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