Si el dicho
reza “cuentas claras conservan
amistades”, también podríamos decir que “cuentas no tan claras conservan
corrupciones”. Esto es precisamente lo que ha venido sucediendo desde hace un
tiempo para acá con las cuentas públicas nacionales. El bochinche lo comenzó el
Banco Central de Venezuela al ocultar desde marzo del año pasado el déficit
fiscal del país, así como los ingresos extraordinarios de la nación, esto
ligado a que el Ministerio de Finanzas aún no ha publicado su Memoria y Cuenta
2012, como tampoco lo hizo durante el año 2010.
Cadivi por su
parte que venía publicando tanto la autorización de divisas como sus
liquidaciones por la Bodega Central de forma trimestral, este año no ha
publicado ni un solo dólar entregado. Del mismo modo, el Bandes el receptor del
Fondo Chino tampoco ha publicado nada de esto de lo que va en el 2013. A esto
se le suma la quebrada Pudrevsa, que hasta el 20008 entregaba balances financieros de manera trimestral, en el 2009
lo hizo semestral, y desde el año 2010 lo está haciendo ahora de forma anual, cada
vez que a Ramírez le da su real gana.
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