Aun sentado en el restaurante esperándote ese 19 de diciembre pensé que no ibas a llegar, pero allí entraste, sin representante, sin que te nadie te acompañara, alta, hermosa, esbelta, Miss Venezuela 2004 y la quinta mujer más bella del mundo del 2005, apenas lo podía creer, ve vistes y enseguida me abrazaste. ¡Hola que tal!, dijiste, ¡así que escribes... películas!, me dijo Mi Prima Ciela, Micaela y Bianca, menos mal que llegó Gonzalo Cubero porque yo lo que tenía era un nudo en la garganta. Entonces hicimos nuestro plan secreto, primero haríamos “Un Hombre de Bien”, escrito exclusivamente para ella que yo financiaría con mis propios recursos, duración 3 minutos, pero sería exhibido en las salas de cine, así que sería tu debut como actriz de cine y yo como director, esta estrella internacional le había aceptado a este humilde profesor de la UC sólo 3 minutos que yo podía ofrecer, e ideamos otro plan. El día de su estreno en el cine para causar conmoción sobre el maltrato infantil y la violencia doméstica, tema del corto que tanto te gustó, ibas a colocar en tu cuenta Twitter “Mónica Spear Salvajemente Golpeada”, para estremecer las redes sociales, como hoy están estremecida por tu muerte, eso no tuvo que pasar así, ¡tenía que ser por tu ojo hinchado en el corto como lo habíamos planeado!, ¿qué te parece la idea?, ¡Me encanta!, contestaste con esa sonrisa imborrable en mi memoria. El plan seguía, con este corto impulsamos el otro que tenemos en el CNAC, “Ellos Piensan en Silencio” que también te fascinó, en un día me hiciste llegar la carta de intención, este tiene 9 minutos, luego haremos “Béisbol”, La película, ¡ah cuéntanos esa!, dijiste con curiosidad, jamás olvidaré tus lágrimas en pleno relato de la misma que hasta tuve que parar para echarte el chiste de la bruja ¿te acuerdas?, cuyas carcajadas aún retumban en el restaurante, ¡es que está demasiado buena la película!, dijiste, y yo te comenté tienes que estar presente cuando yo dirija 20.000 personas en el estadio de Valencia la escena que te hizo llorar.
Terminaron los planes, y te entregué un recuerdito que dijiste le iba a gustar a Maya, también te llevaste mi libro, y colocamos fechas, 9 de enero en la Villa del Cine para ensayo, y pruebas de cámara, vestuario y maquillaje, y rodaje 13 y 14 pero sin lugar definido. Te comentó que había conseguido al mejor sonidista del país el negro Josue Saavedra para que ese debut en el cine fuera espectacular, y decidimos hacerlo en Valencia por cuestiones de seguridad porque yo tenía que cuidar a mi actriz. Pero te debía una película, una película solo para ti, y pensé en “Las Damas de las Camelias”, sueños y más sueños. No te lo dije personalmente, pero quiero escribirlo, se lo dije a algunos de mis amigos, ¡me va a faltar vida en este mundo para agradecerte todo lo que hiciste por mí!, por enseñarme el camino de los sueños, por haber ido a ese restaurant, por siempre ser tan gentil y amable conmigo, por no querer cobrar, por estar dispuesta a ir a Los Guayos a rodar, y por haberme inspirado en convertir el libro “Se llamaba Simón Rodríguez”, en un guión para largometraje, lo escribí en una semana, créelo, y te lo iba a mostrar en nuestro ensayo de este jueves 9, para decirte también que allí tenías un papel, ibas a ser la esposa del maestro de Bolívar, María de los Santos Ronco, te hubiera gustado sin duda, en cada uno de mis guiones que escriba ibas a tener participación, ahora en cada línea que escriba estarás en mi corazón, por eso entre tú y yo, no habrá despedida mi estimada, querida, admirada y amada Mónica, así es, escribo películas, ah Maya esta fuera de peligro.
Terminaron los planes, y te entregué un recuerdito que dijiste le iba a gustar a Maya, también te llevaste mi libro, y colocamos fechas, 9 de enero en la Villa del Cine para ensayo, y pruebas de cámara, vestuario y maquillaje, y rodaje 13 y 14 pero sin lugar definido. Te comentó que había conseguido al mejor sonidista del país el negro Josue Saavedra para que ese debut en el cine fuera espectacular, y decidimos hacerlo en Valencia por cuestiones de seguridad porque yo tenía que cuidar a mi actriz. Pero te debía una película, una película solo para ti, y pensé en “Las Damas de las Camelias”, sueños y más sueños. No te lo dije personalmente, pero quiero escribirlo, se lo dije a algunos de mis amigos, ¡me va a faltar vida en este mundo para agradecerte todo lo que hiciste por mí!, por enseñarme el camino de los sueños, por haber ido a ese restaurant, por siempre ser tan gentil y amable conmigo, por no querer cobrar, por estar dispuesta a ir a Los Guayos a rodar, y por haberme inspirado en convertir el libro “Se llamaba Simón Rodríguez”, en un guión para largometraje, lo escribí en una semana, créelo, y te lo iba a mostrar en nuestro ensayo de este jueves 9, para decirte también que allí tenías un papel, ibas a ser la esposa del maestro de Bolívar, María de los Santos Ronco, te hubiera gustado sin duda, en cada uno de mis guiones que escriba ibas a tener participación, ahora en cada línea que escriba estarás en mi corazón, por eso entre tú y yo, no habrá despedida mi estimada, querida, admirada y amada Mónica, así es, escribo películas, ah Maya esta fuera de peligro.
8 de enero de 2014.